
Es extraño, hace mucho tiempo no sentía la emoción de recibir un regalo que me sorprendiera tanto como estas pequeñas Mafaldas. Que re bonito es sentirse querido y consentido como cuando eres niño, aunque sea por un rato, aunque sepas que despertarás siendo adulto y que mañana te espera la misma rutina, los mismos pensamientos y la misma vida... Gracias Reyes Magos por el detalle van lindo, pero hubiera preferido me trajeran un poco de valor para ser realista y soñar lo imposible...