DE PINTA...

Hoy me fui de pinta, no me presenté a trabajar con el pretexto de atender algunos asuntos pendientes, hoy fui dueña de mi día, hoy paseé tiempo conmigo, hoy probé nuevamente los paliativos de LIBERTAD...

Extrañaba tanto tener tiempo libre, hacer cosas para mi, ensimismarme y pensar en todo menos en
lo real...

Recordé los tiempos en que iba a la escuela, miré las aulas, a los profesores, las cafeterías, el pasto donde muchas veces me refugiaba cuando no entraba a las clases, incluso pasé por el café internet que cada fin de bimestre nos veía preocupadas y "apuradas" por entregar trabajos; tomé el microbus que por lo general iba a reventar a todas horas, recorrí el camino que por cuatro años me fue cotidiano y ahora me es extraño...

Me di tiempo para leer y pensar en un sitio destinado a la lectura al aire libre en una céntrica biblioteca, por varias horas me escapé del mundo; ya de regreso a la realidad me asomé a donde Erinia y yo solíamos ir a menudo a mirar fotografías pero esta vez fue diferente porque sentí que cada serie de fotos me miraban y me hablaban y querían darme un mensaje ("Hay más tiempo que vida" ó "Nadie lo recuerda todo, quizá porque no es importante" ó "Ausencias presentes"); el recorrido continuó por el mercado de sueños, ahí donde se encuentran los colores, las texturas, las formas mezclados en un sincretismo de culturas, todo se encuentra
bajo aquel techo de lámina cobijando artesanías...

Caminando por las calles del Centro Histórico, comiendo en donde el hambre me agarró, fumando el cigarrito pa'l "relajamiento". Creo que mi lugar favorito en el mundo es el centro, versátil sitio de múltiples funciones y complaciente para todos los gustos y todos los ánimos...

Ya no recordaba que la soledad me lleva a mis límites, ya no recordaba lo que la soledad me hace sentir, la verdad es que ya no se si aún me gusta sentirlo, supongo que sólo es la falta de costumbre...

Coyoacán fue la última parada en MI día, no hay mucho que decir a cerca de lo que ahí se encuentra, sólo que esta vez fue más especial que las demás...

Llegó a su fin con la Luna sonriéndome, lo mejor: me sacié del abrazo reconfortante en los brazos adecuados...